viernes, 12 de junio de 2015

UNA LECTORA NADA COMÚN

Una lectora nada común de Alan Bennet es el libro que hemos leído en el mes de mayo, libro que nos ha gustado porque es una historia sin muchos recovecos, lineal, de escritura sencilla, que se lee fácilmente y de una sentada. El relato tiene como centro la lectura y el acto de leer, caricturizando a la clase política como no lectora, situación ingeniosa y suponemos que resulta aún más divertido para el público inglés.
Altamente recomendable.

CEMENTERIO DE PIANOS

El mes de abril vino con aires portugueses de la mano del escritor José Luis Peixoto, con su libro CEMENTERIO DE PIANOS.
Relato póetico y fantasmal, el libro está construido en torno a las voces de un padre y un hijo, (ambos muertos), llamados Fransico Lázaro. Situada en Benfica y en el centro de una Lisboa pura, sin maldad ni tiempo,la novela sumerge al lector en un taller de carpinteria donde los pianos rotos esperan a ser despiezados: metáfora de las cosas ( y los hombres) que no mueren porque sirven para dar vida a los vivos.
 El libro también refleja que toda Olimpiada tiene sus héroes, pero estos no son únicamente los que se cuelgan las medallas, los hay que fallecen en el esfuerzo como personajes de una tragedia griega. A este último grupo es al que pertenece el héroe de Cementerio de pianos.
El padre de Lázaro empieza a narrar cuando muere, y luego narra Lázaro, y las historias son las mismas, y al final encajan y no sabemos si el padre es el hijo. Ni si Lázaro es su padre...